
El renacimiento italiano en pintura comenzó en Florencia con los frescos de Masaccio.
La creación de espacios creíbles permitió a los artistas mejorar la representación del cuerpo humano sobre paisajes naturales.
A la vuelta del siglo XVI, especialmente en el norte de Italia, los artistas también comenzaron a utilizar nuevas técnicas en la manipulación de la luz y sombra.
Carla Casimiro Vera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario